martes, 28 de octubre de 2014

Resfriado y Naturopatía

Aquí os dejo algunos consejos para combatir el resfriado común.

Fitoterapia.
Equinácea: Para estimular nuestro sistema inmune, cuando aparecen los primeros síntomas del refriado. Sus propiedades hacen que sea un potenciador de nuestras defensas; por eso también se puede usar como preventivo de la enfermedad.
Propóleo: si los síntomas son fuertes porque ya hemos contraído la infección podemos hacer uso del Propóleo que es una sustancia que producen las abejas, cuyas propiedades son desinfectantes y antibióticas.
Tila: Tomar una infusión de esta planta  provoca  sudoración ayudando a eliminar toxinas a través de la piel.
Drosera: En infusión o jarabe, esta planta con propiedades antitusígenas y calmantes  ayuda a combatir uno de los síntomas más persistentes en el resfriado, la tos. 

Agentes Naturales de Salud.
Pediluvios: Indicados para recuperar la pérdida de temperatura del cuerpo. Estos “baños de pies en agua fría de corta duración” se realizan sumergiendo los pies unos dos minutos en un recipiente que contenga agua fría y seguidamente se buscará la reacción orgánica de calor, llamada hiperemia responsiva, bien con un paseo o si no es posible, debemos abrigar los pies, sin secar, con un paño de lana. Esto provoca una reacción circulatoria descargando de sangre la cabeza, cuello, pecho y vientre, por eso está muy indicado en dolores de cabeza, tos, afecciones de oído y todos los síntomas propios del resfriado.
Baño de vapor facial: está muy indicado para la fluidificación y disolución de la mucosidad en las vías respiratorias superiores y medias.

Alimentación.
Licuados de frutas y verduras: al mismo tiempo que ayudan al sistema excretor también, gracias a los nutrientes contenidos en algunas frutas y verduras, estaremos reponiendo las vitaminas y minerales necesarios para no perder las fuerzas y conseguir hidratarnos y nutrirnos. Un ejemplo de zumo sería el licuado antioxidante de naranja, limón y zanahoria que nos aporta principalmente vitamina c y a, ambas responsables de la formación y mantenimiento de los tejidos y en concreto la vitamina c juega un papel importante en el metabolismo de los leucocitos (sistema inmune).
Evitar: Comidas grasas y lácteos. Hay un remedio popular para combatir el resfriado, que es tomar un vaso de leche caliente. En este caso debemos saber que la proteína principal que contiene la leche, la caseína, es de difícil degradación ya que precisa de un sistema digestivo en óptimas condiciones y cuando estamos refriados todos nuestros sistemas están debilitados. La caseína que no se descompone completamente puede provocar síntomas que afectan  a nuestro sistema digestivo (diarreas o estreñimiento) y a nuestro sistema inmune generando mucosidad, rinitis, conjuntivitis, picores/urticarias, etcétera.

¡Buena salud!

lunes, 13 de octubre de 2014

Alcalinidad-Acidez

¿Por qué debemos controlar el equilibrio de acidez/alcalinidad en nuestro organismo?

El cuerpo humano trabaja de forma correcta cuando su medio interno tiene un pH ligeramente alcalino.
Nuestras células se alimentan de los nutrientes que viajan por el espacio extracelular. Si  este líquido extracelular es ácido estaremos contaminando los nutrientes que alimentan nuestras células, por esos los residuos tóxicos del metabolismo, que generalmente son ácidos, suelen ser eliminados y no se reciclan. Por otro lado, si es alcalino estaremos nutriendo correctamente a nuestras células. Así, podemos decir que los nutrientes inadecuados que viajan por este espacio afectaran a nuestras células y los adecuados, es decir los que respetan el pH del entorno, protegerán a nuestras células.

Al mismo tiempo hay que comentar que en nuestro cuerpo hay una gran cantidad de bacterias que viven y crecen en armonía con nuestros tejidos, pero pueden volverse muy dañinas cuando el medio en el que viven se altera, es decir, cuando cambia su pH.
Esta alteración se da cuando tenemos dietas ricas en azúcares e hidratos de carbono o consumiendo productos contaminados, como por ejemplo químicos que están en el aire y en el agua.


Por estas razones es preferible consumir alimentos que respeten el pH de nuestro organismo.